Irán:
El 26 de diciembre de 2003 un terrible terremoto de magnitud 6.3 en la escala de Richter, desbastó la región de la histórica ciudad de BAM, en el sureste de Irán, que quedó destruida en un 60%. La legendaria fortaleza de la ciudad se vino abajo. La mayor parte del personal médico de Bam murió a consecuencia del movimiento telúrico y se destruyeron las infraestructuras sanitarias de la zona. Las primeras estimaciones del gobierno iraní, que inmediatamente pidió ayuda internacional, fueron de 20.000 muertos y más de 50.000 personas heridas.
Desde el Summa112 se preparó un equipo para partir hacia la zona como parte del contingente español coordinado por el Ministerio de Asuntos Exteriores a través de la AECI. constituido por 1 médico, 1 enfermero y 2 técnicos sanitarios. Partieron hacia la zona el 2 de enero de 2.004. Como complemento al contingente se aportó un vehículo todo terreno que fue muy útil para el buen desarrollo de la misión.
A su llegada establecieron un puesto médico asistencial donde iniciaron la atención a la población. Hicieron una evaluación sanitaria y pronto estimaron la conveniencia de la llegada de más personal por la gran cantidad de heridos y sobre todo, la necesidad de traumatólogos, a ser posible pediátricos, por la enorme cantidad de niños afectados.
Así, se completó el contingente con dos traumatólogos pediátricos del Hospital Gregorio Marañón y un enfermero que se incorporaron al grupo una semana más tarde. Prestaron asistencia sanitaria desde el día 4 de enero hasta el 18 del mismo mes, en que la apertura del hospital en la zona tomó el relevo en la atención de los pacientes, con regreso a España y llegada el día 23.
Fueron tratadas más de 3.000 personas de diversas patologías, destacando las lesiones traumáticas secundarias como secuelas del terremoto y la atención a los niños -un 9% del total de pacientes- en gran medida por patología habitual esperable a su edad y el entorno, empeorado por la destrucción causada por el seísmo.